miércoles, 24 de mayo de 2017

Unos días por Berlín: Segundo día por la tarde.

Desde el Reichstag nos movimos hacia la Potsdamer Platz, un espectacular lugar en el que parece mentira que se haya creado de la nada uno de los lugares más emblemáticos del Berlín de este momento.















Arrasada en la IIGM y tierra de nadie en la Guerra Fría, hubo una carrera frenética entre los mejores arquitectos del planeta por llenar este espacio tras la reunificación alemana, y aunque sigue habiendo grúas por todas partes, el resultado es del todo espectacular.

Además de los rascacielos, los hoteles y la principal avenida de la zona albergan la Berlinale, el festival de cine, y un sin fin de escaparates al Berlín más ultramoderno, destacando las fachadas enteras dedicadas a las nuevas tecnologías.








El Legoland, aunque de pago, es una maravilla para los más pequeños, y para muchos mayores también.










El Sony Center, un espacio cubierto con un centro comercial entre altos edificios que hace de moderna ágora es un hallazgo que ya es un icono de Berlín pese a ser tan reciente.











De allí salimos al Tiergarten, el espacioso parque berlinés, pero antes pasamos por los edificios que albergan la Filarmónica de Berlín, una lástima no poder entrar.











Terminamos el agotador pero encantador paseo en el propio Tiergarten, donde los pequeños pudieron quemar un poco de adrenalina y los mayores comprobaron lo bien cuidado que está el mayor parque de Berlín. Yo aproveché para fotografiar un montón d especies animales que no me esperaba encontrar aquí, ya os las pondré.

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